miércoles, 5 de febrero de 2020

SUSTAIN OVERDRIVE DISTORSION 2da Parte

(Continuación de la entrada anterior)

Aca voy a comentar un poco cual es para mi, la mejor manera de conseguir una buena distorsión con un sustain considerable y como tratar de equilibrar eso con el volumen final.

Si bien ocasionalmente probé y usé distintas marcas y modelos de amplificadores a lo largo de los años (Peavey 5150, VHT Pitbull, Soldano SLO, Mesa Boogie, Laneys etc) aca fundamentalmente voy a referirme a  modelos de Marshall, que son los que mas usé, los que conozco mejor y ademas también sirven como parametro general para otros amps.

Voy a ir en escalera con los amps, de menor a mayor cantidad de distorsión, asi que los primeros serian los MKII, modelos 1959 (100watts) y 1987 (50w) que son los mas limpios y con menos overdrive de todos.
Estos posiblemente sean los modelos mas conocidos de la línea Marshall. Jimi Hendrix, Ritchie Blackmore, Yngwie Malmsteen, Eric Clapton, Jimmy Page, Eddie Van Halen, Angus y Malcolm Young entre otros, son solo algunos de los usuarios mas conocidos de este modelo de Marshall.

(Marshall modelo 1987 50 watts arriba y Marshall modelo 1959 100 watts abajo)

Yo usé estos amps entre 1995 y 2002, fundamentalmente durante la etapa de "Magiar" entre 1999 y 2002.

(Si tenes dudas con respecto a estos amps, mira el post anterior)

La manera mas directa, brutal y salvaje de generar sustain y overdrive con estos amps limpios, es subiendoles el volúmen.

Los cabezales Marshall MKII tienen la particularidad de tener una potencia bestial, pero no distorsionan o saturan a bajo volúmen, de modo que la única manera de generar un poco de overdrive es subirles el volúmen. En mi caso usaba un cabezal de 50 watts y uno de 100, para este caso es mejor el de 50 ya que puedo subirle mas el volúmen sin que se haga demasiado alto.

(Arriba de los Marshalls el pedal Visual Sound Jeckyll & Hyde y al lado una válvula 5881)

El sonido de esta clase de amps cuando se les sube el volumen es muy similar al de AC/DC (particularmente al de Malcolm Young) o sea es casi limpio y permite tocar acordes de 6 cuerdas con terceras y otros intervalos conflictivos con la distorsión sin que se haga una bola indescifrable de ruido, pero tiene mucho cuerpo, empuje y huevos y también bastante sustain, aunque no ese sustain infinito que a veces se escucha, para eso hay que agregar algo mas.
Si bien este sonido es excelente desde el punto de vista musical, y seria perfecto para tocar blues o un hard rock en el estilo AC/DC, la realidad es que para tocar heavy metal, machacar y generar esos armónicos agudos y comprimidos que se escuchan tanto en ese estilo, se queda corto.

Lo que yo hago para conseguir la distorsión que necesito, es poner el equipo lo mas fuerte que permita el lugar donde estoy tocando (debo reconocer que siempre toqué a muy alto volumen porque me gusta sentir en el cuerpo esa potencia, y podría admitir algún pequeño exceso de vez en cuando) de modo de obtener un sonido que desde el amplificador solo es levemente saturado, pero gordo y muy claro y con un rango dinámico muy completo y presente, me refiero a que los graves los medios y los agudos están equilibrados y puedo escuchar bastante bien las tres frecuencias. La distorsión, overdrive o ganancia no la saco de una sola fuente, sino mas bien de una combinación de tres, de forma tal que en realidad en ningún eslabón de esta cadena hay distorsión propiamente dicha, sino mas bien pequeños overdrives y sumas de volúmenes, lo que me permite obtener un sonido final con mucho sustain, armónicos y cuerpo, pero muy definido.

Como comenté antes, yo usé estos amps mayormente durante la decada del 90, particularmente con Magiar. Y esto es lo que hacia para obtener mi sonido.

Vale aclarar que esta cadena de sonido que voy a describir era usando siempre guitarras Stratocaster con mics de muy poca ganancia, que no es un dato menor.

De la guitarra iba a un pedal de overdrive muy suave, el mas clásico ejemplo de este tipo de pedales es el Ibanez Tube Screamer, famoso por poseer un tono muy musical y cálido, pero no siempre lo tenia prendido, a veces solo lo prendía para los solos. Este pedal unos años despues lo reemplazé por otro excelente overdrive, un Visual Sound "Jeckyll & Hyde"


Del Tube Screamer entraba a un pre-amp valvular en forma de pedal que es de donde obtenía algo así como el 50 o 60 por ciento del overdrive. Hay muchas opciones de esta clase de pre amps, los que mas me gustaron en ese momento fueron el Mesa V-Twin (Mesa Boogie) y el Matchless Hot Box, este último es particularmente limpio pero con un sonido muy musical y claro, pero hay muchas variantes mas. La clave acá está en que NO sea demasiado distorsionado, para poder mantener la definición y el cuerpo de las notas, eso quiere decir que el control de overdrive del pre, no esta al máximo, pero el volumen del pre esta bastante alto, tal vez en un 75%.


El Tube Screamer no es un distorsionador, la saturación que produce es poca y suave, pero sumado al pre le agrega un toque de armónicos y le suma sustain y algo mas de overdrive, pero el sonido final sigue siendo claro, y al igual que en el pre amp, el control de overdrive del pedal, rara vez lo uso mas allá del 60%, pero la perilla de volumen del pedal en este caso casi siempre la tengo muy alta, a veces en 100%.

De ahí voy al amp, que está a un volúmen considerable y ese volúmen me provee el resto del overdrive pero sigue siendo claro, de modo que para cuando la señal llega al amplificador, pasó por dos lugares antes que la levantaron enormemente y le sumaron ganancia y armónicos, y al llegar al equipo el volumen le provee el sustain final, de forma tal que el sonido resultante es considerablemente saturado, pero muy definido, grueso y de alguna manera limpio, ya que en definitiva en ningún lugar de esta cadena hay distorsión en el sentido antimusical de la palabra.

Una aclaración con respecto a este modelo específico de Marshall. El que tiene o vio un MKII (1959) sabe que tiene 4 entradas. La entrada que mas comunmente suele usarse es la 1, es decir la de arriba a la izquierda.


La contra de este método es la necesidad de tocar a un cierto volumen, de modo que lo que trato de hacer es mantener el volumen del equipo al máximo que me permitan las circunstancias y si necesito bajarlo, entonces tengo que compensar esa perdida de ganancia subiendo el control de overdrive del pre y del pedal.

Para resumirlo, cuanto mas fuerte esta el amp, menos cantidad de overdrive tengo que usar desde el pre y el pedal, y cuanto menos volumen tengo en el amp, mas tengo que subir los controles de overdrive del pre y del pedal, es cuestión de encontrar el equilibrio entre estos tres factores.

Hay dos cosas que quiero remarcar con respecto a esta clase de sonido.

Esta clase de volúmenes pueden resultar perjudiciales para el oído si uno se expone a ellos durante muchos años, como suele ser el caso de músicos profesionales. Rara vez va a pasar que alguien se dañe los oídos por estar expuesto a un volumen alto de vez en cuando, pero si uno está expuesto a este volumen continuamente, con los años se puede producir una gran perdida de la audición y otra clase de problemas para nada bienvenidos por nadie y mucho menos por un músico. Beethoven hubo uno solo...

Pasé mas de 30 años tocando a volúmenes altos, en escenarios, estudios y salas de ensayo, y mi audición está bien, y esto es porque hay algo que nunca hice, que es ponerme adelante de mi amplificador y para ser sincero, no creo que nadie que esté en sus cabales quiera estar en ese lugar, a menos que quiera cambiar de peinado o sus rasgos faciales.

Siempre me pongo de manera tal de escuchar el amp desde algún ángulo en el que no esté directamente enfrentado al mismo, y casi nunca armo los equipos en stack, eso quiere decir que evito poner un bafle encima del otro, ya que de esa manera el sonido se proyecta directamente a la altura de la cabeza, y el impacto en el oído es inevitable. Me gusta sentir la potencia y la presión del sonido y no soporto usar tapones (que es otra opción) pero nunca dejo que el sonido vaya directo a mi cabeza.

La audición perdida no se recupera mas, así que hay que cuidarla!

Lo segundo que vale la pena aclarar con respecto a este tipo de sonido, es que la demanda de control técnico que impone en el instrumento, es mucho mayor que la que demanda un sonido a menor volúmen, con mas efectos y mas comprimido.

La diferencia puede resultar shockeante para alguien que no está acostumbrado a usar un sonido así, pero la paga en calidad y claridad es también muy grande. La diferencia en respuesta dinámica es enorme y el peso y cuerpo de cada nota también.

Un encordado 009 con esta clase de sonido se siente como un 011, uno 010 se siente como un 012 y así sucesivamente, la potencia del sonido parece multiplicar el peso de las cuerdas en las manos y cualquier error o imperfección en la técnica se magnifica pero también cualquier frase bien tocada suena clara, segura y avasallante. Es el equivalente a amplificar una imagen cada vez mas, cualquier imperfección en una foto se ve mucho mas cuando la definición de esa foto es mayor y cualquier virtud también, de modo que es un arma de doble filo y exige tocar con la mayor precisión y claridad posible.

Nunca fui muy adepto a los efectos, a pesar de que en algunos casos son interesantes y necesarios para lograr ciertas cosas, pero para mi estilo y sonido, con esto y una reverb ocasional, dependiendo el lugar físico donde estoy tocando, alcanza para lograr lo que quiero.

En la próxima entrada seguimos con el JCM800 (2203)


CLASES DE GUITARRA:
Aca
CURSOS A DISTANCIA:
Aca
Suscribite a mi nuevo canal de You Tube!
https://bit.ly/331yfML



No hay comentarios.:

Publicar un comentario